INDICACIONES
Las cicatrices constituyen una de las principales preocupaciones estéticas tras una cirugía, una herida accidental o incluso tras brotes de acné severo. Gracias al desarrollo de la tecnología LASER es posible mejorar el aspecto de las cicatrices, tanto atróficas como hipertróficas. Además, también nos permite prevenir el desarrollo de cicatrices hipertróficas y acelerar el proceso de cicatrización, por lo que el LASER se ha convertido en un aliado esencial para pacientes intervenidas de mastopexia, abdominoplastia y cesárea, entre otras intervenciones.
¿EN QUÉ CONSISTE EL TRATAMIENTO?
El tratamiento se basa en 3-4 sesiones de estimulación dérmica profunda con un LASER fraccionado de 1565nm. Gracias a su longitud de onda es capaz de estimular los fibroblastos, llevando así aun aumento en la síntesis de colágeno y elastina, a menudo deficitarios o anómalos en las cicatrices. En función del tamaño de la cicatriz se puede realizar con anestesia tópica o sin ella.
A menudo se complementa con 1-2 sesiones de láser CO2 para lograr el mejor resultado posible.
RECOMENDACIONES ANTES DEL TRATAMIENTO
Es necesario evitar la exposición solar los días previos al tratamiento.
¿CÓMO ES LA RECUPERACIÓN?
Después de la sesión es habitual un leve enrojecimiento de la piel. En cualquier caso, es muy importante proteger adecuadamente la piel con protector solar durante los primeros 15 días.
Los efectos adversos del tratamiento con IPL son mínimos. Después de una sesión es habitual un leve enrojecimiento de la piel, que además es fácilmente disimulable con maquillaje. En cualquier caso, es muy importante proteger adecuadamente la piel con protector solar durante los primeros 15 días. De la misma forma es imprescindible evitar tratamientos invasivos como peelings o dermabrasiones durante tres semanas.
Los resultados aparecen de forma progresiva, aunque habitualmente son visibles desde la primera sesión. Para la mayoría de tratamientos suelen ser necesarias un total de 2 a 4 sesiones, que deben espaciarse por unas 3-4 semanas. Es recomendable además realizar una o dos sesiones de mantenimiento al año.
